Fue un día lleno de sorpresas. Hay que reconocer que la idea de hacer una preboda en el parque de la Warner es, cuanto menos, un tanto friki. Pero Laura y Nacho no son gente normal que digamos, y como yo estoy también un poco loco, pues allí que nos fuimos…
El parecido de Nacho con Orlando Bloom es más que razonable, así que ésta es técnicamente mi primera preboda de una celebrity, que conste. Laura se podría parecer en algunos gestos a la Princesa Leia con no pocos kilos menos, pero ya le gustaría a la malograda Carrie Fisher parecerse a “mi Laura”: mientras que la señora de los moños se dedicaba a pasear su lacónica mirada por el espacio, Laurita es todo alegría, con una mirada que destruye murallas y derrite el corazón… del mismísimo Orlando Bloom. Ahí es ná. 😀
Las sorpresas vinieron en tríos: Una vez allí, nos dimos cuenta de que el sitio te da escenarios peculiares y estructuras chulas que normalmente no tienes a disposición. Eso mola. La segunda fue que nuestros héroes infantiles estaban en paro, o echando la siesta habida cuenta del brutal calor, porque allí no apareció ningún peluche vivo en todo el día. Y la tercera fue conocer un parque Warner sin colas, lo cual va fenomenal para probarlo todo, pero es fatal para la digestión: ni Nacho ni yo hemos ido al baño normalmente desde que probamos La Fuga. Laura, mucho más inteligente que estos dos machos camachos, se mantuvo en tierra y llegó a casa de una pieza y con una enorme sonrisa de sensatez en su cara.
En fin, que esto de reírse de uno mismo y hacer el gil de vez en cuando es algo divino. Como ellos.
Disfrutad.
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No puedo estar, mas de acuerdo con Almudena, IMPRESIONANTES los novios, es que son GUAPISIMOS, y gracias y “FELICIDADES” al fotografo.
Simplemente ESPECTACULARES me han encantado los novios estan guapisimos y al fotógrafo ENHORABUENA